Llega el asesor GPT, un Gran Profesional Tributario

Fermín Lozano, Director de la Unidad de Negocio para autónomos, pymes y asesorías de Cegid en España. Foto: Cortesía. Portal ERP España.

En los últimos años la figura del asesor fiscal ha tenido que adaptarse y evolucionar para mantenerse al día con las últimas demandas tecnológicas y normativas. Como en el clásico Cuento de Navidad, de Charles Dickens, hoy viajaremos a través del tiempo para observar cómo ha cambiado el rol del asesor fiscal desde el siglo pasado hasta la actualidad y cómo se perfila su futuro cercano. Spoiler: este viaje nos mostrará la importancia de implementar la factura electrónica y cómo los asesores deben liderar este cambio para asegurar que sus clientes, aparte de cumplir con las normativas, se beneficien de las ventajas que ofrece la digitalización.

Capítulo I: El asesor del pasado, siempre fiel a su calculadora

En una oficina gris y llena de cubículos, encontramos al asesor fiscal del pasado rodeado de montañas de papeles y archivadores. Trabaja incansablemente, revisando facturas y registros a mano, consultando manuales de normas fiscales que parecen interminables. En aquellos días, la contabilidad es un proceso arduo y minucioso, donde cualquier error puede significar una larga noche de correcciones y cálculos manuales.

Este tipo mira con desdén a sus compañeros, algunos de los cuales intentan modernizarse. “La tecnología sólo complica las cosas”, murmura mientras llena su pluma con tinta dispuesto a realizar una cantidad desmesurada de operaciones numéricas. La responsabilidad de la correcta facturación recae completamente en sus manos, y cualquier fallo, en su reputación.

Capítulo II: El asesor del presente, implementando la digitalización paulatinamente

Saltamos ahora al presente, donde encontramos a un asesor que combina el conocimiento tradicional con herramientas tecnológicas avanzadas. Por supuesto, dispone de un ordenador portátil en su escritorio, un smartphone siempre a su alcance y utiliza un software de contabilidad o ERP que le permite manejar grandes volúmenes de datos con precisión, agilidad y eficiencia.

Este es consciente de la relevancia que la factura electrónica va a tener próximamente, una herramienta que no sólo agiliza los procesos contables, sino que también garantiza mayor transparencia y control. Sin embargo, se enfrenta a otro desafío: muchos de sus clientes, especialmente aquellos más arraigados en métodos tradicionales, se muestran reacios a adoptar este cambio, a pesar de su próxima obligatoriedad. Sabe que debe formarlos y guiarlos en esa transición para asegurar que su implementación sea exitosa y beneficiosa para todos.

Capítulo III: El asesor del futuro próximo, el asesor GPT

Y así llegamos al futuro cercano, donde el asesor tributario se convierte en la nueva norma. En este mundo, la factura electrónica no es sólo una opción; es una exigencia reglamentaria. Además de tener que llevar al día las últimas normativas y tecnologías, este también ha de desempeñar un rol proactivo en la concienciación y formación de sus clientes.

El asesor utiliza inteligencia artificial y blockchain para asegurar que las facturas sean precisas, inmutables y fácilmente accesibles. Su responsabilidad ha evolucionado; ya no es sólo un guardián de la contabilidad, sino un guía que lleva a sus clientes hacia el futuro, ayudándolos a adaptarse a las nuevas tecnologías y a cumplir con las normativas de manera eficiente. Es lo que hemos denominado el “asesor GPT”: Gran Profesional Tributario. Pues son los principales interesados en que sus clientes - es decir, las empresas - adopten la digitalización y, de este modo, les faciliten el trabajo diario.

Epílogo: la transformación del asesor y la factura electrónica

La historia del asesor ha cambiado radicalmente desde los días de calculadora y archivador, hasta la era digital avanzada. La evolución hacia la factura electrónica es inevitable y necesaria.

Esta figura no sólo resulta relevante en este nuevo entorno, sino que, además, se vuelve aún más crucial. Estos deben convertirse en embajadores del cambio, facilitando la comprensión y adopción de nuevas tecnologías, ya sea la factura electrónica o cualquier otro avance que permita tanto al cliente como a sí mismo optimizar su tiempo y productividad.

Es fundamental que comprendan su rol central en este proceso y se preparen para ser líderes y educadores en sus comunidades profesionales. La transición a la factura electrónica representa una oportunidad para redefinir y elevar la profesión, asegurando que los clientes estén bien informados y preparados para enfrentarse a los desafíos y oportunidades del futuro tributario.

Como en Cuento de Navidad, de Dickens, la historia del asesor nos muestra que, aunque los tiempos y las tecnologías cambien, la dedicación y el compromiso con la excelencia deben permanecer por siempre. Los asesores han de sumarse al cambio y guiar a sus clientes hacia un futuro más eficiente y transparente, asegurando el éxito y la sostenibilidad de sus negocios en el mundo digital.