Confluent prevé un 2026 marcado por la IA agéntica y el streaming continuo

La compañía especializada en data streaming pronostica un avance pragmático basado en datos en tiempo real y arquitecturas más resilientes

Francisco Molero, Country Leader de Confluent en España y Portugal. Foto: cortesía. Portal ERP España.

Confluent ha publicado sus previsiones sobre la evolución de la inteligencia artificial (IA) y el streaming de datos para 2026, un análisis que parte de la situación observada en 2025. Según la compañía, las plataformas de data streaming se encontraban entonces cerca de un punto de inflexión, pasando de una adopción inicial a consolidarse como motores de diferenciación competitiva. Aunque la cultura organizativa tradicional seguía siendo un freno para algunas empresas, el contexto ha evolucionado más rápido de lo previsto, incluso en los escenarios más optimistas.

El cambio más relevante ha sido la velocidad y el alcance de la adopción de la IA. Los proyectos piloto han dado paso a cientos de casos de uso en producción que abarcan procesos de múltiples etapas, desde la prevención del fraude hasta la atención al cliente. Este crecimiento ha elevado las exigencias sobre los datos que sustentan estos sistemas, impulsando la necesidad de infraestructuras más robustas y de una gestión más disciplinada de la información.

Francisco Molero, Country Leader de Confluent en España y Portugal, afirma que “aunque la resistencia cultural no ha desaparecido, la presión competitiva está acelerando su disminución”. Añade que “los resultados tangibles han desplazado el foco desde las expectativas teóricas” y que los equipos de datos dedican ahora menos tiempo a tareas de infraestructura para centrarse en la gobernanza en flujo, la creación de productos de datos reutilizables y el desarrollo de analítica orientada a reducir latencias y costes. Según Molero, las previsiones para 2026 apuntan a un avance más pragmático basado en datos en tiempo real, un streaming consolidado como columna vertebral siempre activa y una organización de datos rediseñada para transformar señales en valor medible.

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A partir de este análisis, Confluent estructura sus previsiones en cinco grandes tendencias que marcarán el próximo año.

1. La producción de IA agéntica se acelerará

La compañía sostiene que, si 2025 fue el año de los asistentes inteligentes, 2026 será el de los agentes capaces de completar tareas de principio a fin. El documento describe un cambio desde modelos que “sugerir y escalar” hacia sistemas que “decidir y ejecutar”, con agentes que clasifican incidentes, optimizan procesos de cumplimiento, evalúan riesgos y resuelven solicitudes de servicio. Para ello, necesitarán datos continuos, marcos de políticas y trazabilidad desde el inicio, además de mecanismos de retroalimentación que permitan aprendizaje o intervención humana cuando sea necesario. Los equipos comenzarán a gestionarlos como productos, evaluando su desempeño mediante indicadores empresariales.

2. Las compañías contratarán a más ingenieros de datos

Confluent señala que el rendimiento de los ingenieros de datos en tiempo real dejará de medirse por la disponibilidad de clústeres o el número de conectores configurados. En su lugar, se valorará la calidad de los productos de datos en flujo, la gobernanza incorporada y la reducción de tiempos de ciclo. El texto indica que no será imprescindible contar con equipos especializados en sistemas distribuidos si se domina SQL, lo que permitirá acercar la lógica de negocio a los eventos. Muchas organizaciones prevén ampliar sus equipos para reforzar su capacidad de adopción y gestión de la IA.

3. El sector público empezará a adoptar el tiempo real

La compañía anticipa que gobiernos, organismos reguladores y fuerzas de defensa acelerarán procesos en áreas donde cada minuto cuenta, como cumplimiento fiscal, elegibilidad para beneficios, detección de fraudes, operaciones fronterizas y supervisión de mercados. Este avance estará impulsado por la presión política para hacer más con menos y por la madurez de la infraestructura tecnológica, que permite sustituir procesos por lotes por procesamiento continuo sin perder capacidad de auditoría. Los ciudadanos obtendrán resultados más rápidos y consistentes, y los reguladores podrán demostrar sus acciones sin reconstruir historiales retrospectivos.

4. La flexibilidad multi-cloud pasará de ser una estrategia de IT a una estrategia de negocio

Confluent destaca que depender de un único proveedor de nube se ha vuelto arriesgado debido a interrupciones, variaciones de precios o cambios en políticas. Por ello, más organizaciones incorporarán el multi?cloud como parte central de su plan de resiliencia. Esto implicará elegir tecnologías capaces de operar entre distintos proveedores para trasladar o escalar operaciones sin interrupciones. La capacidad de mantener el flujo de datos entre plataformas se considerará un indicador de madurez y competitividad.

5. La gestión externalizada como nuevo estándar

La compañía prevé que más equipos opten por plataformas de streaming gestionadas, ya que mantener internamente pilas complejas resulta cada vez más difícil de justificar. La escasez de talento especializado y la alta carga operativa hacen que la externalización sea una opción más racional. Esto permitirá a los equipos centrarse en gobernanza en flujo, productos de datos reutilizables y lógica de negocio, reduciendo imprevistos y acelerando la entrega de valor.

Molero resume esta evolución señalando que “la mayoría de las organizaciones todavía utilizan solo una pequeña parte de los datos que generan”. Añade que esta situación comenzará a cambiar a medida que el streaming se consolide como la vía predeterminada para convertir eventos en información accionable. Confluent concluye que 2026 será un año menos centrado en expectativas y más en avances medibles respaldados por resultados concretos.